¿Te has encontrado alguna vez en una situación social en la que no sabías que decir, en la que no sabías como participar en la conversación? ¿Has notado ese sudor frío de pura incomodidad? ¿O te has encontrado con la mujer de tus sueños y a los 5 minutos tu conversación ya se había acabado?
Si tu respuesta es que sí, no te asustes porque no eres muy
diferente al resto. El saber qué decir en una conversación es uno de los
grandes desafíos del ser humano.
"¡No te conformes con estar solo! Únete a nuestra comunidad de citas y encuentra a alguien especial."
Pues bien, en estas líneas te voy a enseñar como puedes
escuchar y animar conversaciones, de forma que nunca más te faltarán temas de
conversación y podrás participar en cualquier reunión social.
Recuerda que estamos tratando un problema de nerviosismo y
no de genética.
Cuando no sabes que decir te pones nervioso, y entonces,
ningún tema sale de tu mente. No es porque no estés preparado genéticamente
para la conversación, es que estás nervioso.
La mente humana tiene una capacidad limitada, y si la
tienes ocupada con tus preocupaciones, tus miedos, tus vergüenzas propias y
ajenas, no podrá ocuparse de ofrecerte temas de conversación.
Las conversaciones no son más que cadenas en las que los
comentarios que cada persona realiza son los eslabones.
Los conversadores aficionados rompen la cadena con
comentarios que, o bien no están relacionados con el eslabón anterior, o bien
no continúan la cadena en el mismo sentido. Al acabar de leer estos párrafos,
tú serás un conversador profesional y sabrás como actuar.
Pongamos un ejemplo. Imagínate que un amigo tuyo viene de unas
vacaciones en la Feria de Abril de Sevilla y te dice: “Acabamos de regresar de
unas vacaciones en la Feria de Sevilla”.
Un conversador sin preparación diría: “¿De verdad?”, o
“Debe de haber estado bien”.
Con esas respuestas se rompe la cadena. Tu amigo ya no
tiene nada que añadir, no has dejado conexión abierta para que un nuevo eslabón
se una a la cadena.
Mal hecho.
Para saber lo que tienes que decir, te tienes que fijar en
los NUDOS CONVERSACIONALES de la frase original, esto es, cualquier palabra o
frase de un comentario del que se puede sacar algo sustancioso de lo que
discutir.
Regresemos a la frase de tu amigo: “Acabamos de regresar de
unas vacaciones en la Feria de Sevilla”.
¿Cuáles son los nudos de esta frase?
Acabamos (1ª persona del plural), vacaciones, Feria y
Sevilla.
Por tanto, tu próximo comentario debería fijarse en
cualquiera de estos nudos y provocar la continuación de la cadena.
Veámoslo con ejemplos:
-
Acabamos (1ª
persona del plural)
§ Acabamos
de regresar de unas vacaciones en la Feria de Sevilla.
§ ¿Habéis
ido solos u os habéis llevado a los niños?
§ Solos,
solos. Los niños se han quedado con mis suegros.
-
Vacaciones
§ Acabamos
de regresar de unas vacaciones en la Feria de Sevilla.
§ ¡Vacaciones!
Ya no recuerdo la última vez que tuve unas. ¿Os habéis relajado?
§ Bueno,
no mucho, la Feria es una auténtica locura, pero, claro, de vacaciones siempre
se descansa.
-
Feria
§ Acabamos
de regresar de unas vacaciones en la Feria de Sevilla.
§ Supongo
que habréis visto a un montón de gente famosa por allí.
§ No
te creas, se ve más que nada a famosillos.
-
Sevilla
§ Acabamos
de regresar de unas vacaciones en la Feria de Sevilla.
§ ¡Sevilla!
¿Ha hecho mucho calor?
§ Por
el día sí, pero luego por la noche refrescaba.
¿Ves como todos los comentarios que siguen un nudo
conversacional provocan un nuevo comentario de la otra parte, es decir, siguen
la cadena?
Sencillo, ¿verdad?
Y lo mejor de todo es que es una fuente inagotable de temas
de conversación. Unos eslabones llevan a otros, y estos a otros nuevos, y así
hasta que tú decidas acabar.
Además, la gran ventaja de actuar de esta forma es que
siempre podrás dirigir la conversación hacia los temas que te interesen. ¿Cómo?
Muy sencillo, céntrate en aquellos nudos que generan
conversaciones cómodas para ti, conversaciones que te interesan.
Por ejemplo, imagínate que de todos los nudos que habíamos
detectado en la frase de tu amigo, solo te interesa Sevilla.
Ningún problema, tu siguiente comentario irá en esa dirección
para continuar la cadena hacia el punto que a ti te interesa.
Sin embargo, para poder detectar los nudos conversacionales
de una manera clara es necesaria la práctica y el entrenamiento, así que a
partir de ahora tendrás que esforzarte.
"¡No más búsquedas infructuosas! Haz clic aquí para encontrar a alguien especial."
Presta atención a las frases de la gente con la que
conversas. Escúchalas y detecta los nudos, y, después crea comentarios que
sigan cada uno de los nudos, y así una, dos, y mil veces, hasta que hayas
alcanzado suficiente nivel para que te salga de manera natural.
Así que practica, practica y practica. En el siguiente
boletín te enseñaré como utilizar tu entorno para encontrar conversaciones.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario